Actualmente se ha incrementado la resistencia de los microorganismos tanto en la comunidad como intranosocomio. En forma paralela, los continentes han perdido sus fronteras naturales para los seres humanos a causa de los innumerables viajes diarios que se realizan de un lugar a otro del planeta.
El hombre es así el principal vector de enfermedades, dejando en el pasado el "privilegio" de patologías específicas, endémicas de algunas regiones.
Ante esta situación los médicos actuales deben tener presente ante un diagnóstico infeccioso que el paciente pertenece a un sistema abierto, donde las diferentes enfermedades, sin fronteras naturales y producidas por gérmenes multi-resistentes, son ahora no sólo factibles sino cada vez más frecuentes.
Enfermedades como el , dengue, hantavirus, malaria, HIV/sida, fiebre amarilla, tuberculosis, úlcera péptica, neumococo resistente a la penicilina, etc, son patologías que han emergido y reemergido en América Latina, generando un desafío para su control y tratamiento.
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